El inicio del curso en la Universidad Politécnica de Cartagena ha traído consigo un nuevo conflicto, esta vez relacionado con la supresión del servicio ferroviario los fines de semana entre Murcia y Cartagena. Esta medida, impulsada por el Gobierno de Pedro Sánchez, ha generado malestar entre los miles de estudiantes que cada semana deben desplazarse para asistir a clases.
Antonio Landáburu, diputado regional y presidente de Nuevas Generaciones Región de Murcia, ha criticado duramente esta decisión, señalando que afecta directamente a los universitarios de la zona. Según Landáburu, la imposibilidad de viajar los fines de semana dificulta el retorno a casa de los estudiantes, así como el desplazamiento de aquellos que asisten a la Universidad de Murcia desde Cartagena.
Esta no es la primera vez que se presenta un conflicto de transporte en la región, ya que anteriormente más de 1,2 millones de viajeros se vieron afectados por la supresión de la línea de tren entre Murcia, Lorca y Águilas. A pesar de las promesas de restablecer el servicio en 2024, se estima que no estará operativo hasta el año 2026, lo que ha generado descontento y desconcierto en la comunidad estudiantil.
Ante esta situación, Landáburu ha exigido respuestas urgentes a Óscar Puente y ha denunciado el abandono y maltrato continuo hacia los estudiantes de la Región por parte del Gobierno. Las falsas promesas y la falta de soluciones concretas han evidenciado una vez más la falta de compromiso con el bienestar de los jóvenes universitarios.
En este contexto, es fundamental que se encuentre una solución rápida y efectiva que permita a los estudiantes de la Región de Murcia acceder a un transporte público adecuado y que garantice su movilidad de manera eficiente y segura.
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