En la ciudad de Cartagena, existe una antigua leyenda que se remonta al Cementerio de Santa María, ubicado entre las calles Jara, Aire y San Miguel. Según relata Juan Soler Cantó en sus “Episodios Legendarios”, la historia cuenta cómo un joven perdió la vida a manos de los temidos “corchetes”, los agentes de la ley que patrullaban en los siglos XVI, XVII y XVIII por las calles de la ciudad portuaria.
La leyenda cuenta la trágica historia de un joven llamado Ismael, quien estaba enamorado de una chica llamada Cecilia. Ambos jóvenes se encontraban apasionados y llevaban su amor a cada rincón de la ciudad, incluso al antiguo cementerio de Santa María, creyendo que era un lugar perfecto para sus encuentros debido a su tranquilidad y soledad.
Según la leyenda, en una noche acordada, Cecilia no se presentó a la cita, lo cual sorprendió a Ismael pero no le dio importancia. Sin embargo, los días pasaron y ella no volvió a aparecer, lo cual lo llevó a investigar. Fue entonces cuando descubrió que Cecilia había fallecido, y al darse cuenta pisó su tumba, desatando así un grito desgarrador que alertó a los vecinos y atrajo la atención de los “corchetes”.
Los temidos guardias urbanos de la época, los “corchetes”, persiguieron a Ismael, quien desesperado e incrédulo ante la noticia de la muerte de su amada, no atendió a los llamados de alto. Finalmente, fue interceptado y la tragedia se consumó en las proximidades del Callejón de Bretau, entre el callejón y la Calle Jara, en lo que se consideró una muerte injusta y evitable.
Desde entonces, se dice que el alma de Ismael vaga por la zona, asustando a quienes se aventuran por el lugar donde yace su amada y donde él perdió la vida a manos de la guardia.
Si te interesa descubrir más leyendas y misterios de Cartagena, te recomendamos seguir los relatos de Santi García, autor de “Cartagena Legendaria” y explorador de las Rutas Misteriosas en la ciudad.
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