En un esfuerzo por entender mejor las pautas migratorias y de nidificación de las tortugas bobas, el consejero de Medio Ambiente, Universidades, Investigación y Mar Menor, Juan María Vázquez, ha supervisado la liberación de 20 ejemplares de estas criaturas en Isla Plana, Cartagena. Estas tortugas, equipadas con emisores satelitales subcutáneos, serán monitoreadas de cerca para estudiar su comportamiento en el medio natural y las posibles amenazas que enfrentan.
Este evento marca la culminación de un programa de 50 liberaciones este año en la Región de Murcia con animales provenientes del Centro de Recuperación de Fauna Silvestre. En los últimos diez años, se ha liberado un total de 153 tortugas bobas en la zona.
La costa de la región se está convirtiendo en un verdadero ‘Territorio Tortuga’, con avistamientos recientes de intentos de desove en La Manga, sumados a los nueve registrados el año anterior en diferentes zonas como La Manga, Calblanque y Águilas.
Estos esfuerzos forman parte del proyecto ‘Profundización en el conocimiento de las amenazas que afectan a los cetáceos y tortugas marinas en la Región de Murcia (CAMEMMUR)’, financiado por la Unión Europea a través de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Gracias a la colaboración de la Fundación Biodiversidad y la Fundación Oceanogràfic, se podrá analizar en detalle el comportamiento y la supervivencia de estas tortugas tras su liberación.
Para garantizar una mejor adaptación de las tortugas antes de su liberación, los ejemplares estuvieron en el Oceanogràfic de Valencia durante unas semanas, recibiendo cuidados especiales para mejorar su estado físico y aumentar su tasa de supervivencia en libertad.
Después de la liberación, el consejero Vázquez visitó el punto de información de ‘Territorio Tortuga’ en Isla Plana, donde se produjo una puesta de huevos el año pasado. La colaboración de voluntarios y organizaciones locales ha sido fundamental para proteger y vigilar la seguridad de estos animales en la zona.
Las tortugas bobas, clasificadas como ‘Vulnerables’ en España y ‘En peligro’ a nivel internacional, enfrentan diversas amenazas como la ingestión de plásticos, la captura accidental en redes de pesca y la destrucción de sus hábitats de anidación. Estos esfuerzos de conservación son cruciales para proteger a esta especie en peligro.
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